Aneto, Pirineos

Ascensión el 16 de Octubre del 2.004.

Es un recorrido de alta montaña, duro y largo, por terreno difícil, caos de bloques, glaciar, que se puede ver además dificultado por bruscos e imprevistos cambios de tiempo (tormentas de verano). Conviene ir bien equipado con piolet, crampones, ropa de abrigo y es aconsejable llevar cuerdas (sobre todo para cruzar el glaciar).

La época recomendada para la ascensión es el verano y principios de otoño.

Es conveniente madrugar para afrontar la subida con cierta calma y evitar tormentas vespertinas. Valoración según escala de dificultad alpinas: F (10), aunque no debería desdeñarse el famoso Paso de Mahoma, corta arista que debería se catalogada como PD (IIº).

Situado en el macizo granítico de La Madaleta, el Aneto es, con 3.404 m., el pico más alto de todo el Pirineo.

La idea de subir al Aneto para mi no era nueva, ya me había comprado la guía y el mapa en el año 1.995, estaba federado por esa época y pagaba mis cuotas religiosamente a un club de montaña de Alcobendas (Madrid), pero la idea y el momento pasaron para mejores tiempos.

En Octubre del 2.004, con mis amigos intente subir al Aneto, éramos un grupo menos numeroso y más compenetrado.

Empezamos madrugando, un buen desayuno y a las 04:00 ya estábamos esperando la furgoneta que nos dejaría al pie del sendero de subida. El traqueteo del vehiculo “flotando” sobre las piedras nos despertó del todo, frió y oscuridad.

Habíamos contratado un guía local, una buena idea surgida seguramente de la cabeza de Miguel Angel, el guía nos demostró su seguridad y eficacia durante la ruta.

A oscura apuramos la penúltima chocolatina y nos atamos las botas y mochilas.

No estábamos todos, Mamen y Toña se quedaron en Benasque esperando nuestro regreso.

La verdad que a oscuras, con frió y una pequeña lluvia, el camino de subida no se me hizo largo ni pesado. Según ascendíamos y dejábamos el frondoso bosque a nuestras espaldas, las piedras y la nieve se hacían presentes.

El guía nos avisa de que al otro lado de la montaña hay una buena ventisca, nosotros le pedimos seguir hacía adelante y así hacemos.

En el Ibons de Corones hacemos una parada, se cruzan de bajada tres montañeros a toda velocidad, se esta preparando una ventisca a toda velocidad y tiene mala pinta.

El guía nos ordena bajar y así hacemos. Mucho viento y frió en segundos, meto la pata quitándome los guantes y poniéndomelos a toda velocidad, creía que las manos se me congelaban, nunca he pasado tan mal quince minutos, solo sentía un dolor en las manos horrible, un hormigueo que me quemaba.

Bajamos con cuidado, más abajo nos protege del viento las altas laderas, ha sido un buen día, una nueva experiencia para próximas rutas.

Realizamos fotos según bajamos, una fina lluvia nos acompaña hasta la furgoneta, que nos devolvería sobre las doce de la mañana a Benasque.

A Mamen y Toña solo le dio tiempo a tomar un café por el pueblo, vuelta al piso y ducha caliente (para algun@s).

El Aneto me sigue esperando.